domingo, noviembre 04, 2007

Humildad

Hoy la vi. Sí, a ella. La película.

Como todas las películas realmente buenas, (independientemente de su crítica o de su final que bien puede tomarse como seco para algunos) sea trágica, interesante y hasta divertida, me hizo llorar. No de tristeza, no de alegría: Me hizo llorar por que hizo funcionar a mi cerebro, como sólo funciona en contadas ocasiones, dejando de centrarse en mi vida respecto a los demás, para aventurarse en la peligrosa tarea de buscarme a mi mismo aunque sea inconscientemente por sólo un instante.

Me hizo reflexionar en eso que siempre he buscado, eso que alimentó mi ego por mucho tiempo y tal vez lo haga en otras ocasiones futuras, pero definitivamente en menor proporción después de este momento: el destino. Pero no hablo del destino como algo inevitable que rige la vida, aceptando o rebatiendo su existencia en contraposición con la casualidad, pues ese aspecto, aunque con relevancia para mi, no es materia de un post digerible; Hablo más bien de ese sentimiento que a uno siempre lo hizo sentir especial, que lo alimentó durante muchos años como una razón para ver el sol todos los dias, hablo de el pensar, dentro del fondo de tu corazón, que eres importante por que tienes o juegas (o jugarás) un papel imprescindible en este mundo saturado de entes que buscan lo mismo secretamente. Hablo de cómo uno necesita sentir que tal vez la vida es la vida por que sólo se trata de una preparación a lo verdaderamente importante que llegará tarde o temprano: tu misión en ella.

Me dejó con un sentimiento de saciedad. Por primera vez me dejé a mi mismo, sin darme cuenta, entrar en mi, y analizar bien qué es lo que quiero, y encontré mas de lo que buscaba, un sentimiento que por ahora me parece bastante digno, visto desde otra perspectiva totalmente diferente: la resignación.

La película trata entre otras cosas, y desde mi particular punto de vista, sobre cómo la gente puede, motivado por la creencia de tener un papel predestinado en un orden establecido, hacer cosas maravillosas, o estropearlo todo. Habla del propósito en la vida que algunos buscan en vano sin encontrarlo y otros rechazan, sin aceptarlo. Por un momento pensé en todas esas veces en que, sin querer, sin saber y sin intentar ser soberbio (me salía natural), me dije a mi mismo que debía tener una razón para existir, que había nacido para algo importante. Generalmente son tus padres quienes te dicen eso, pero esta vez no: respecto a ese tipo de cosas nunca he escuchado los cumplidos que mi familia pudo llegar a hacerme (aunque no me desagraden, hay que admitirlo), siempre pensé por mi mismo y gracias a mi gran ego que era algo especial, por el simple hecho de que no podía concebir el tener la capacidad de entender las cosas sin hacer algo al respecto, pero a mismo tiempo nunca lo hice, ni creo que sea el indicado para hacerlo. Tal vez ese es precisamente el punto: no todas las personas pueden ser algo, y el simple hecho de entenderlo, o entender ciertas cosas (aunque muchas veces sin poderlas expresar)no te hace merecedor a ser protagónico de la vida, y tal vez precisamente tu papel es el aprender a expresarlo y contar la historia, ser un personaje circunstancial, o incluso un extra.

Lo que intento decir, es que desde este preciso momento, y gracias a esa película, me di cuenta de que lo que importa no es lo que tú llamas destino, o el mandar, o el tener, sino el disfrutar. llegué a la sincera conclusión de que sería feliz con el solo hecho de que algo en mí, ya sea mi amistad, mi furia, mi comportamiento tonto o tal vez un consejo, ayudó o afectó a persona A, quien a su vez afectó a persona B, que en un efecto dominó sucesivo llegó algún día a afectar a alguien con el valor y capacidad suficiente para hacer algo importante, o provocar un cambio para bien, tanto en la sociedad como en las cosas mas particulares y sencillas imaginables, que a fin de cuentas pueden llegar a afectarlo todo. Seré feliz con el solo hecho de saber que trato de ser una buena persona y de vivir en paz: creo que de esa manera logras afectar a más personas, pero positivamente y obteniendo a cambio la codiciada calma.

Al fin encontré resignación, pero de un tipo muy especial, no de la que te hace conformarte, sino de la que te hace sentirte pleno con lo que eres, y darte cuenta de que el punto no es lo que serás, sino el grado en que disfrutas lo que eres, y me hizo darme cuenta una vez más de que es precisamente la persona que quiere ser alguien en ocasiones la menos indicada para serlo, así como el que no lo busca incesantemente el que tiene posibilidades de lograrlo, aunque no lo quiera cumplir cuando el momento llegue. Así es, y desde mi perspectiva, así debe ser.

"El verdadero líder es el que realmente no quiere serlo." - Jesus Alberto Maytorena Mendivil.

Aunque ello no garantice que todos los que no quieran deban serlo, (solo unos pocos pueden) y me incluyo dentro del sobrante inerte, pero lleno de felicidad.

Ya no quiero ser astronauta cuando sea grande.


ps. "La dama en el agua": con Paul Giamatti y Bryce Dallas Howard.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Negrooooo.. que es esoo..


Deja de ver alicia en el pais de las maravillas.. no es buena aunque sea de niños. el conejon es nosivo para cualquiera.. jajajaj xD

o de que pelicula hablabas?...

auu.. osea negrito y humilde a que vamos a llegar?? eeeeh? que pretendes ??

Todo bien?.... por aca tmb salvo por las pestes del gordon (nuestro perro)esta bien pesadoo el vato.. she gordon u,u.. como andas tu? que cuenta tu bello distrito federal..

saludos pa tooda la washada de mi parte.. un beso y mi gran admiracion.. xD..

pd-- kien mato a paco stanley??

cuidate muchoo..

Te extrañoo muchooo...!!!


I LOVE U..

LA MARABUNTA.
mejor conocida como
soy muy astuta, soy
una zorra xD
(no hagan sus ideas)
es chiste local

FIN POR QUE MATARON A TROSKI
JAJAJA

Anónimo dijo...

yo digo que tu cabeza es directamente proporcional a tu tercer pié.
buenas noches.